A medida que nos acercamos al 2025, una cosa que es cierta es la incertidumbre en sí misma; sin embargo, con toda la claridad posible, a continuación, se exponen tres tendencias que probablemente veremos surgir o incrementarse en la minería en 2025. Escribe la Dra. Janina Elliott, directora de segmentos de Seequent, Minería.
Los cambios recientes e inminentes de liderazgo en países del G7 como Estados Unidos, Canadá y Alemania, así como el inicio de los paquetes de estímulo de China, lograrán que los inversores mantengan su tendencia durante los próximos meses.
Aunque un contexto geopolítico tenso promete un aumento sostenido de las materias primas refugio como el oro y la plata, el panorama para los metales industriales es menos seguro.
Escribe la Dra. Janina Elliott, directora de segmento de Seequent, Minería.
1. DEMANDA DE MINERALES CRÍTICOS
Se espera que la demanda de minerales críticos aumente en 2025, motivada por un impulso universal para lograr una economía con menos emisiones de carbono, la electrificación del sector del transporte y la instalación de centros de datos a gran escala. Ante el reto de las tensiones geopolíticas, el proteccionismo creciente por temor a la escasez y las dependencias de la cadena de suministro, así como la inflación, tanto la industria como los inversores deben equilibrar la volatilidad a corto plazo con las ganancias a largo plazo.
El mercado mundial de exploración, impulsado por la demanda, experimentará un nivel continuo de consolidación en el que dominarán las compañías de oro, cobre, níquel, litio, uranio y elementos de tierras raras. Las grandes compañías participarán en la desinversión activa y enfocarán sus esfuerzos en mejorar la exploración y optimizar la extracción en los sitios existentes.
Al mismo tiempo, nuevos actores comenzarán a participar a medida que se suavizan las barreras entre mercados adyacentes. Las potencias de Silicon Valley, como Microsoft, Amazon y Tesla, no son los únicos ejemplos que han ingresado en el espacio minero con el fin de acortar la cadena de suministro de minerales críticos. Múltiples compañías automotrices, como General Motors, han seguido su ejemplo y están invirtiendo de forma significativa en la minería regional a fin de contrarrestar la escasez de minerales y mantener la competitividad.
Por su parte, las grandes compañías mineras se asocian con los fabricantes de transporte establecidos para abordar la necesidad de impulsar las operaciones con energía verde a través de la electrificación de la flota o el uso de celdas de combustible de hidrógeno. Impulsadas por los criterios medioambientales, sociales y de gobernanza (Environmental, Social and Governance, ESG) en los objetivos mineros, casas como Rio Tinto, Vale y Fortescue han creado fondos de capital de riesgo para invertir en energías limpias, una tendencia que probablemente se mantenga. Otro ejemplo de un cruce de mercados más directo proviene del espacio del petróleo y el gas que participa de forma activa en la extracción de litio de salmueras. Sin lugar a duda, veremos un surgimiento continuo de nuevos participantes a fin de remodelar los competidores y el panorama de inversión en la minería.
Es probable que en 2025 las grandes compañías mineras se asocien con los fabricantes de transporte para ecologizar sus flotas mediante la electrificación o el uso de pilas de combustible de hidrógeno.
2. GESTIÓN AVANZADA DE DATOS
Aunque sea desalentadora, la incertidumbre puede presentar tanto desafíos como oportunidades para todos, ya sea para quienes se dedican a la exploración temprana de campos verdes o a las operaciones avanzadas de campos industriales abandonados.
La clave es crear un valor real a partir de los datos, ya sea que los taladros giren o no. La tecnología posee un historial comprobado de desbloquear el potencial al aumentar la comprensión de los conjuntos de datos existentes y optimizar el conocimiento del yacimiento a fin de orientar o extraer con mayor precisión, lo que reduce el costo y, a largo plazo, el riesgo.
La gestión efectiva de los datos mineros seguirá siendo un desafío importante dentro de la industria. Los volúmenes crecientes de datos y la falta de estandarización son obstáculos que las compañías deben superar en todas las etapas de la cadena de valor.
Los datos siguen siendo un área en la que se puede desbloquear el verdadero valor, ya sea que los taladros giren o no.
Según el Informe de gestión de datos de Seequent de 2023, en el que se encuestó a más de 700 geoprofesionales, más del 70 % de los encuestados consideraba que la gestión de datos es muy importante o crítica para su organización. Sin embargo, 60 % no contaba con la información necesaria para tomar decisiones basadas en datos. De hecho, la mayoría dedicó una gran parte de su tiempo a la gestión de datos en lugar de a su labor como profesional capacitado. Este sentimiento se mantiene en 2025.
Además de la gran cantidad de información no estructurada recopilada, gran parte de los datos están aislados y carecen de control de versiones, lo que impide no solo que el individuo obtenga valor, sino que detiene cualquier forma de colaboración eficiente con las partes interesadas.
El futuro del sector minero reside en desmantelar las barreras de interoperabilidad de los datos y desarrollar flujos de trabajo integrados. Las organizaciones de cualquier escala que inviertan en herramientas de gestión de datos fácilmente navegables e intuitivas, así como en tecnología basada en la nube, se reservan el derecho a ganar. La clave es lograr que los grupos multidisciplinarios de toda la cadena minera se comuniquen, utilicen y visualicen de forma activa los datos de los demás, y coordinen sus esfuerzos a fin de obtener el mejor resultado posible para mejorar el conocimiento del yacimiento.
La tecnología lo hace posible y, en la era de Starlink, el acceso remoto a los datos y la transmisión visual, la industria tiene todos los componentes básicos para maximizar el valor de los datos y construir la imagen digital más clara del subsuelo.
La cuarta revolución industrial (fourth industrial revolution, 4IR) ya está en marcha, y podemos esperar que continúe manifestándose en innovaciones en la industria minera relacionadas con la gestión de datos mineros en 2025.
3. INTEGRACIÓN DE LA IA O “LA CUARTA REVOLUCIÓN INDUSTRIAL”
La cuarta revolución industrial (4IR) está en encaminada y la industria minera está en vías de revolucionar la cadena de valor al fusionar los procesos existentes con la inteligencia artificial (IA), la robótica, el Internet de las Cosas (Internet of Things, IoT) y una variedad de otras tecnologías que se están volviendo indispensables con rapidez.
No hay duda de que la IA en la minería acelerará el análisis de datos, mejorará los flujos de trabajo a través de la semiautomatización controlada y reducirá los errores manuales para los geoprofesionales con los que trabajamos. La IA liberará a los equipos operativos críticos a fin de que se enfoquen en actividades más significativas y ofrezcan tanto una mayor eficiencia empresarial como mejores resultados. A algunos les puede preocupar que este cambio ponga en riesgo los puestos de trabajo, pero ¿realmente es así?
Cuando Seequent introdujo el modelado implícito en el mundo de la geociencia, la industria tuvo preocupaciones similares. En cambio, lo que observamos fue una revolución del espacio de trabajo. Al mejorar la precisión y la velocidad en el modelado en 3D, una nueva generación de geocientíficos se incorporó a la fuerza laboral. Lo que realizaba una sola persona, comenzó a ser logrado de manera eficiente por equipos globales que aportaban una variedad de experiencia en geociencias, lo que permitía construir modelos integrados. A su vez, esto condujo a un aumento perpetuo de los objetivos y a una continua contratación de geólogos, impulsada por el aumento de la demanda de recursos minerales.
Hoy no es diferente. De hecho, el aumento continuo en los volúmenes de datos solo requiere de más manos, así como de la tecnología para obtener una perspectiva real y crear valor. Si bien los títulos de los puestos de trabajo pueden cambiar, la necesidad creciente de entregar datos optimizados siempre requerirá personas capacitadas, desde un graduado experto en tecnología hasta un geólogo veterano enfocado en la calidad, el aprendizaje y el panorama general.
Además de poseer un doctorado en Geología de la Universidad de Columbia Británica, la Dra. Elliott cuenta con 18 años de experiencia en minería, casi 12 de los cuales dedicados al software de geociencias y la gestión de datos en Seequent.