En un artículo publicado en la revista E&P Magazine, Henry Lyatsky, de Lyatsky Geoscience Research & Consulting Ltd, defiende el uso de los métodos geofísicos gravitatorios y magnéticos en la exploración petrolera. Advierte que, cuando se ignoran los datos útiles de los métodos geofísicos gravitatorios y magnéticos, la reducción del riesgo es incompleta y los resultados de los programas de exploración son menos confiables.
Los métodos geofísicos gravitatorios y magnéticos son una parte fundamental de la exploración petrolera. No reemplazan a los métodos sísmicos. En vez de eso, aportan a ellos. A pesar de ser, en comparación, de baja resolución, tienen algunas ventajas muy importantes. A un costo comparativamente muy bajo, los reconocimientos desde el aire de campos potenciales pueden cubrir grandes áreas. Al permitir una cobertura rápida de la región, ahora, los estudios por gravedad incluso se pueden grabar desde una aeronave con una confiabilidad bastante alta.
En este artículo, Lyatsky explica el significado de las anomalías. La propiedad física de la roca que vincula las anomalías gravitatorias con la composición de la roca es la densidad, explica Lyatsky. La propiedad de la roca que vincula las anomalías magnéticas con la composición de la roca es la magnetización total. Por eso, cada método de campo potencial ofrece su propia imagen del subsuelo. Como responden a las variaciones laterales en las propiedades de la roca, los métodos geofísicos gravitatorios y magnéticos son los más adecuados para detectar discontinuidades pronunciadas como las fallas. Por el contrario, los métodos sísmicos son mejores para detectar variaciones verticales en la roca e interrupciones de ángulo bajo, como los límites de las capas.
Se presentan dos ejemplos de usos exploratorios para ilustrar la aplicación efectiva de los métodos geofísicos gravitatorios y magnéticos. Por un lado, se encuentra la cuenca sur y central de Alberta, en donde los datos gravitatorios y magnéticos se pueden procesar específicamente para resaltar lineamientos sutiles; por el otro, están el pilar tectónico y la fosa tectónica de la cuenca Queen Charlotte en alta mar, en donde los datos magnéticos terrestres y marítimos fueron esenciales para delinear las rocas ígneas extrusivas e intrusivas.
Lyatsky concluye apelando a los expertos en gravedad y magnetismo de la exploración petrolera para que piensen como sus clientes (que, en general, son geólogos y sismólogos) y presenten su trabajo desde los primeros principios, con una matemática mínima y con la máxima consideración geológica. Solo a partir de ese momento, dice Lyatsky, se podrán derrumbar los muros de manera que los administradores de la exploración puedan ver claramente lo esencial de la utilidad práctica de los métodos geofísicos gravitatorios y magnéticos.
Lea el artículo completo en E&P Magazine.