Una de las grandes ventajas de la energía solar es su escalabilidad, y este mes de mayo tuvimos un ejemplo perfecto de cómo puede funcionar en la práctica, desde un colosal panel solar que se enciende por primera vez hasta un pequeño proyecto con visión transversal que pretende acelerar el avance de una ciudad hacia la energía ecológica.
En el mismo mes, la Agencia Internacional de la Energía (AIE) anunció que esperaba que la inversión en electricidad baja en carbono alcanzara el doble que la energía de combustibles fósiles en el 2024, principalmente, debido a un aumento en el gasto para proyectos solares.
En el extremo superior de la escala, China puso en funcionamiento la planta solar más grande del mundo, con capacidad de generar 6000 millones de kilovatios-hora por año, suficiente para abastecer a un país pequeño. El sitio de 33 000 acres en la región desértica alrededor de Urumqi, al noroeste de Xinjiang, eclipsa el segundo y el tercer conjunto más grande (también en China), y continúa la búsqueda acelerada de energía ecológica de la nación, un logro que la AIE describió recientemente como “extraordinario”. (También predijo que China sería responsable de casi el 60 % de la capacidad mundial de energías renovables para el 2028. Solo en el 2023, China instaló más capacidad de energía solar nueva que el resto del mundo entero en el año anterior).
Si está pensando en adoptar el tesla como unidad de medida, entonces el sitio de 3.5 GW podría cargar 2 millones de vehículos eléctricos por año.
Xinjiang se está convirtiendo rápidamente en el centro de energías renovables de China, que no solo es rico en energía solar y eólica, sino que también fabrica paneles solares a un ritmo y precio que preocupa a las empresas occidentales (posiblemente, una de las razones por las que Estados Unidos eligió mayo como el mes para aumentar las tarifas de los paneles solares y los automóviles eléctricos fabricados en China).
La grave situación de la energía solar en España
Mientras tanto, en España, vimos el lanzamiento del proyecto Requiem In Power (RIP), un plan para instalar paneles solares en los cementerios de Valencia…
Se están colocando alrededor de 6500 paneles en criptas, encima de tumbas y en otras estructuras de cinco cementerios públicos. Hasta ahora se han instalado algo más de 800. Aunque es un pequeño comienzo, si RIP alcanza su objetivo, podría convertirse en el parque solar urbano más grande de España. Los 2,8 MW resultantes se utilizarán para abastecer servicios públicos y algunos hogares locales, y se espera que permitan ahorrar alrededor de 140 toneladas de emisiones de carbono al año.
Forma parte del ambicioso proyecto Misión Climática de Valencia, cuyo objetivo es que la ciudad alcance la neutralidad climática a finales de esta década, 20 años antes del objetivo de la UE para el 2050. El plan tiene la ventaja de conservar la tierra para su uso original, no así cuando se colocan paneles solares en tierras agrícolas y el área se pierde para la agricultura.
(En sentido estricto, la idea no es nueva. Hace varios años, en la ciudad francesa de Saint-Joachim, que se encuentra en medio del humedal Brière, primero cubrieron el cementerio para evitar inundaciones y, luego, tuvieron la idea de cubrir el techo con paneles solares. Por lo tanto, tienen oficialmente el derecho de alardear con la fuente de energía cerca de las tumbas).
Para terminar, volvamos al anuncio de la Agencia Internacional de la Energía. El organismo de control energético mundial declaró que la inversión en energías renovables, energía nuclear, vehículos eléctricos, redes eléctricas, almacenamiento de energía y bombas de calor alcanzará los 2 billones de dólares este año. Alrededor de 500 000 millones de dólares de esa suma se destinarán a la energía solar. Esta cifra duplica el billón de dólares previsto para el gasto en hidrocarburos.